Universidad y Primer Empleo

Para muchos jóvenes los primeros meses de estudio y trabajo al mismo tiempo son frustrantes y suponen un grande y constante estrés y dolor de cabeza. En verdad es muy difícil tener solo 24 horas para tomar clases en la universidad, realizar las tareas, trabajar, dormir y hacer diligencias personales. Es por eso que muchos jóvenes toman las horas de dormir para hacer las tareas de la universidad y las del hogar y recrearse en Internet u organizar cosas, teniendo como resultado pocas horas de sueño.

Pero el hecho de realizar las cosas pendientes en las horas del descanso tiene sus ventajas y desventajas. Una de las primeras es que ganamos tiempo y cumplimos con los quehaceres pendientes, pero una de sus desventajas es que damos menos hora al descanso y por tanto el agotammiento físisco y el nivel de estrés amuentan. Es por eso que hay que ser más razonable con el tiempo y priorizar los quehaceres.

Es normal que la experiencia del primer empleo sea muy agotante, esto se explia porque el metabolismo es sometido a un estilo al que no está acostumbrado y el proceso de adpatación va a depender de la fatiga y la presión que genere el trabajo, de las horas laborales y del nivel de compromisos que tenga la persona tanto en el trabajo como en su vida cotidiana.

Una buena noticia es que la presión que genera el primer empleo y la universidad no es para siempre, puesto que luego nos acostumbramos a ese nuevo estilo de vida, que de vez en cuando nos hace pensar en abandornar el trabajo o la universidad. Con el paso de los primeros meses nos vamos acostumbrando y lo que antes era prioridad en nuestra agenda como el chat, las rumbas con los amigos, horas y horas al teléfono y la televisión van pasando a un segundo plano y es cuando empezamos a enfrentarnos a la realidad de la vida y a madurar.

Pero lo más recomendable es no abandonar ni el trabajo ni los estudios a no ser que sea muy necesario, sino luchar hasta que Doña Adaptación llegue!!!