Avatar

Avatar 

“Avatar no es una película cualquiera, es una investigación dramatizada del desastre natural que estamos causando”. 

Hacen unos días veía un reportaje en el canal de televisión Infinito, titulado “La Tierra sin Humanos”. Explicaba como continuaría la vida de las plantas y los animales sin la existencia de la especie humana. Los árboles seguirían creciendo y dando frutos y los animales continuarían reproduciéndose de lo más normal. Pero también dramatizaban el deterioro mundial que se generaría si las plantas y los animales dejaran de existir y desaparecieran las aguas del planeta. La conclusión final a la que llegaron los investigadores fue la siguiente: la tierra puede continuar sin los seres humanos, pero los seres humanos no podemos vivir sin la tierra.

Avatar, una película de James Cameron, es la mejor y más precisa expresión que he visto acerca de lo que es el hombre y su relación la naturaleza. Avatar es una prueba latente de la interrelación inherente que existe entre los seres humanos y la naturaleza. Desde su inicio, el filme muestra todos los elementos de la naturaleza perfectamente armonizados y crean una relación de dependencia del ser humano hacia la biodiversidad. 

Hacen unos días, mi cuñado y mi hermana me llamaron para invitarme al cine. En vista de que no podía ceder a su invitación por causas ajenas a mi voluntad, ellos dejaron la oferta abierta para otra ocasión y qué bueno que esa otra ocasión fue ayer 18 de diciembre de 2009. 

Al sentarnos en la sala, lo primero que hizo mi hermana fue decirme que a lo mejor la película no me iba a gustar, puesto que en días anteriores le había dicho que no me gustan las películas futuristas ni de robots. Ella resaltó que en Avatar (la película), no había humanos (según ella), pero estaba equivocada porque la película es actualmente mi favorita y también hay mucha participación humana. 

Desde que la película empezó me sentí parte de ella y las cosas que sucedieron me hicieron hacer gran reflexión y quedarme pasmada analizando todo lo que pasaba porque en los más hondo de mi conciencia sabía que se trataba de lo que se vive a diario en nuestros campos dominicanos y en todo el planeta. 

Avatar no es una película cualquiera, es una investigación dramatizada del desastre natural que estamos causando. Al momento de terminar de verla, al menos a mi, me pareció una de las películas mas constructivas que he visto, de esas que generan cambios en el comportamiento de los seres humanos, de esas que desarrollan la conciencia y la sensibilidad. 

Avatar es un filme que se desarrolla en dos escenarios distintos con personajes diferentes que incluso a veces son los mismos. Pandora (lugar ficticio), es otro planeta muy parecido al planeta Tierra. En este viven unos seres nativos que son llamados Na’vi, quienes viven en el Arbolcasa y dependen en gran manera de los animales y de la densa vegetación del bosque. Un grupo de seres humanos llegados desde el planeta Tierra y que en algunos momentos son llamados “La gente del cielo”, llegan a Pandora con la intención de destruir la verde naturaleza de este planeta para extraer de él una supuesta sustancia que les sería útil a ellos en La Tierra. 

Algunos humanos que andaban en la misión se sensibilizan a causa del abuso y deciden apoyar a los Na’vi, quienes son amantes y protectores de la naturaleza y la defienden hasta más no poder con tal de impedir la depredación del bosque. De esta manera las mismas plantas y los animales endémicos de Pandora, e incluso otras tribus vecinas de la principal se unen para que “La gente del cielo” no desplace la naturaleza. 

Los Avatar, son seres creados con genoma humano y Na’vi para establecer relación con los Na’vi a fin de que estos confíen en los avatares quienes más tarde los convencerían de que desalojen el lugar. Los avatares se parecen tanto físicamente a los Na’vi que estos llegan a considerarlos parte de su clan.

Definitivamente he visto muchas películas, pero Avatar es la mejor que he visto. Considero que todo el mundo debería verla porque uno sale del cine con otra visión acerca del planeta y el medio ambiente. Empezamos a ver la naturaleza con otros ojos porque en verdad los Na’vi seríamos nosotros mismos, es decir, un grupo de seres que habitan en un lugar completo y bueno, rico en oxígeno, minerales y especies animales y vegetales, pero la única diferencia entre ellos y nosotros sería que a muchos de nosotros no nos importa ver las palas mecánicas de las constructoras de la República Dominicana acabando con nuestros recursos naturales, áreas verdes, ríos y demás. 

Cada año se talan millones y millones de árboles y ¿Quién lo hace? Pues nosotros mismos. También muchos de los que leerán esto continuarán arrojando basura y desperdicios en las calles, las aceras, los parques y también los ríos, ojala y yo esté equivocada. Por favor, ayúdame a estar equivocada y que esto no vuelva a suceder. 

Además de todo lo anterior también utilizamos aerosoles, secamos los ríos y matamos y maltratamos los animales. Tratamos bien a los perros bañaditos y perfumados de nuestros amigos, pero a los de la calle le queremos tirar el vehículo encima y si ese pobre infeliz al que usualmente llamamos “Rialengo” o “Viralata”, vive la desafortuna de vivir cerca de nuestra casa y merodear nuestro patio y contenedores de basuras hasta somos capaces de llegar al colmo de envenenarlos, aunque reconozco que en nuestro país no tenemos perrera, pero tampoco hacerle daño a ellos es justo. 

Nos colgamos collares de dientes de ballenas y tiburones e incluso muchos utilizan sus aceites. Sinceramente digo que deberíamos ser como los Na’vi, caramba, defender nuestras lomas, nuestras plantas y animales, proteger nuestras especies y protestar por las cosas que las dañan. 

Yo se que el crecimiento de las ciudades provoca que se desmantelen los bosques y los paisajes, pero también se que se pueden hacer rutas alternativas como es el crecimiento vertical (construcción de edificios), para eso existe algo llamado Planeamiento Territorial, para buscar más y mejores formas de planificar las edificaciones sin afectar o por lo menos afectar menos a las personas, pero sobretodo a la biodiversidad en sentido general. 

Avatar es una verdadera manifestación de la interrelación entre los seres humanos y la naturaleza. En ella convergen todas las expresiones de la vida: el ser humano y la reproducción, los animales, los ríos, los elementos químicos, el fuego, el agua, es decir, todo, todo es parte de la vida en Avatar, pero claro aparece “La gente del cielo” (nosotros mismos) y lo destruimos todo. 

Avatar también enseña la importancia de trabajar en equipo. La defensa del medio ambiente debe ser colectiva. En Avatar el clan principal busca apoyo de otros clanes o tribus para luchar juntos por el patrimonio natural de Pandora. Me gusta mucho que algunos de los seres humanos que llegaron a Pandora a realizar esta funesta misión no aguantaron el abuso, el daño, la injusticia y buscaron la manera de mostrarle a los Na’vi lo que estaba por suceder, lo que ellos mismos estaban a punto de hacerle a los nativos. Cuando esos humanos llegaron a Pandora no pensaron que al ver la injusticia se iban a sensibilizar de esa manera pero así fue, no soportaron el abuso y se unieron a los nativos. 

Es sorprendente como todos se unen a la lucha y a la protección del bosque. Los animales, las plantas y los Na’vi defienden la vegetación de Pandora. Indiscutiblemente Avatar es una película actual y muy relacionada a lo que pasa hoy en día con la tala de árboles y las demás formas de deteriorar la naturaleza. 

Sinceramente Avatar es la mejor película que he visto, con el mejor mensaje. A penas eso fue ayer y mi visión de la naturaleza ha cambiado para siempre. Lo que antes veía bien, ahora lo veo mejor. Al finalizar la película, más de docenitas personas que estaban en la sala aplaudieron de forma unánime el filme. La emotividad no se hizo esperar. Avatar es una película que hay que verla. Dicho sea de paso que la tecnología 3D hace que una la viva más intensamente. Aprovecho para resaltar que la dominicana Zoe Saldaña, desempeña un papel preponderante en la película al encarnar el personaje de Neytiri. 

Concluyo recuperando algo que dije más arriba: “Muchos de los que leerán esto continuarán arrojando basura y desperdicios en las calles, las aceras, los parques y también los ríos, ojala y yo esté equivocada. Por favor, ayúdame a estar equivocada y que esto no vuelva a suceder”. 

PD: Jaime David Fernández Mirabal te invito a verla.