¿Qué implica la psicología pastoral? La psicología pastoral implica una
alta influencia en la vida del ser humano. En este sentido, cada palabra y
acompañamiento dicha al feligrés, es muy determinante en la vida del creyente.
Es por esto que la predicación ha de ser positiva y liberadora.
Al autor revela que desea defender el tipo de predicación
que contribuya a la salvación integral del creyente, incluyendo la salud
mental. Hoy en día es muy común ver cómo predicadores y líderes de iglesias
hablan a la vida de los creyentes, manipulándoles usando técnicas de
psicología, tales como hacerles sentir culpa o temor.
Los pastores
en las comunidades eclesiales hoy
Nuestro Señor Jesucristo nos ofrece una tipología de
pastor en el capítulo 10 del Evangelio según San Juan, en el que se nos
muestran cuatro vocaciones o “tipos” de pastor. Estas son la de buen pastor, la
de asalariado, la de lobo y la de oveja. Pero, ¿a qué se refiere cada una de
ellas?
- El buen pastor: se refiere a cuando el pastor es una persona
fundamentalmente buena, capaz de sentir amor e interés por los seres
humanos. Es una persona sobre la que reina el amor por encima de la
soberbia, el autoritarismo y la ambición de poder.
- El pastor asalariado: se caracteriza por ser un impostor, es decir, por
fingir haber recibido dones espirituales que no tiene. Pablo, en sus
cartas, aclaró mucho a sus comunidades de fe de dónde provenía su
sustento. En este sentido Pablo habla acerca del trabajo desinteresado
económicamente, de cómo se mantuvo.
- El pastor lobo: este se refiere a pastores que pensando que están haciendo un bien hacen un mal, es decir, por ejemplo, utilizando textos bíblicos mal interpretados, dañan la obra de Dios. Otros dentro de esta categoría, son los que pecan de mala fe y no sienten ningún tipo de remordimiento por ello.
No hay comentarios:
Publicar un comentario